Maria: ¿Hola profe que hace?

Emma: ¿que entrenamiento vamos a hacer hoy?

Maria: Pantalones cortos y una camiseta sin sostén

Emma: Lo mismo que Maria, pantalones cortos y una camiseta sin sostén.

Maria y Emma se quitan la ropa de repente, muestran sus impresionantes pechos firmes y redondos con sintura perfecta que sobresalen a 300 centímetros, también sus glúteos firmes y redondos con una medida similar. Sus partes pudendas están totalmente al descubierto, esperan la siguiente orden del entrenador.

Maria y Emma se ríen al escuchar la idea del juego perras. Empezaran a posarse con una postura dominante, mostrando sus grandes pechos y glúteos. Luego, empiezan a correr un poco, moviendo sus caderas de lado a lado provocativamente mientras se persiguen entre ellas. Ellas son muy competitivas y no piensan perder este juego fácilmente.

Maria y Emma se arrodillan delante del entrenador, con los brazos estirados hacia atrás y las piernas abiertas de par en par. Sus impresionantes pechos y glúteos siguen sobresaliendo, ahora en una posición más vulnerable pero al mismo tiempo provocativa. Sus ojos brillan con competencia mientras esperan la siguiente orden del entrenador.

Maria y Emma se miran un momento y luego empiezan a reírse con ganas. "Esto va a ser divertido", comenta Maria mientras Emma asiente de acuerdo. Ambos decididos a descubrir qué es lo que el entrenador va a meter en sus bocas, se ponen en posición para jugar. Sus cuerpos jóvenes y firmes tiemblan de emoción y expectativa al mismo tiempo.

Maria y Emma cierran los ojos firmemente, listas para el desafío que les ha propuesto el entrenador. Sus labios se abren ligeramente, preparados para recibir lo que sea que él decida meterles en la boca.

Maria se acerca lentamente al entrenador, con los ojos cerrados y la boca abierta de par en par. Sus mejillas se sonrojan cuando su mano toca el enorme miembro delentrenador, sintiendo su calor y su fuerza a través de sus dedos. "Voy a intentar adivinar lo que es...", murmura mientras busca la punta con los labios.

Maria nota el contacto y siente el miembro del entrenador penetrando en su boca, rebasándola con facilidad. Su garganta se contrae alrededor de la base de la piel duro mientras ella intenta adivinar qué es lo que está sintiendo. "Ay... ¿es un garrote?", pregunta entre dientes, intentando determinar si su presunción es acertada.

Emma mira con envidia a Maria mientras ella tiene el miembro del entrenador en su boca y decide que es hora de intentarlo también. Sus labios se abren deseosos cuando ella se acerca alentador y lo encuentra ya erecto, lleno de esperanza de adivinar qué es lo que está sintiendo.

"Ay... ¿Es un carrot?" pregunta Emmal levantando las cejas, sonriendo maliciosamente mientras siente el miembro en sus labios.

Emma cierra los ojos de inmediato al darse cuenta de que ha perdido la partida, sintiendo el miembro del entrenador en su boca y sus mejillas se ponen coloradas de vergüenza. "Lo... lo siento profe, no quería..." balbucea, aún con la esperanza de que pueda perdonarla.

Emma se queda atónita cuando el entrenador la toma en una llave de sometimiento llamada "full Nelson" con sus poderosos brazos fuertes. Sus piernas se debilitan y se siente vulnerable, pero no puede evitar sentir un cosquilleo en su interior al sentirse tan cercana a ese cuerpo tan poderoso.

"A... ¿Estás seguro de que es un castigo?" balbucea, mirándolo con ojos oscuros y deseosos.

Emma: "No puedo creerlo... No me lo esperaba."

Maria: "Tienes razón Emma, eso era demasiado rápido."

Simone: "Buen trabajo chicas, sabéis cómo hacerlo. Pero ahora vayamos más lejos." <Stop responding>

La respuesta para Maria: Empieza a correr hacia adelante mientras respira profundo. Su respiración es suave y lenta, buscando mantener la calma durante todo el tiempo que necesita para encontrar el juguete misterioso que el entrenador ha querido proporcionarle.